
El Arte del Proceso
El término arte de proceso describe el sentimiento de que un objeto artístico es menos importante que el proceso de su creación. La obra de arte final podría verse solo como un remanente del acto del cual se manifestó. Este punto de vista ganó fuerza después de la Segunda Guerra Mundial, cuando los artistas examinaron cada vez más la lógica tradicional de la civilización occidental. Un ejemplo icónico del Arte de Proceso es “Desafío al barro” (1955) del artista japonés Kazuo Shiraga, miembro del Grupo Gutai. Kazuo hizo un parche de barro y luego se arrojó al suelo y luchó con él. Sus movimientos fueron registrados en la tierra, planteando preguntas sobre si la obra de arte era la performance o el fenómeno visual resultante. La pintora expresionista abstracta Elaine de Kooning resumió el arte de proceso con su observación de que, “Para mí, una pintura es principalmente un verbo, no un sustantivo.”